La domótica hace posible gestionar las condiciones ambientales de un espacio, a través de comandos que permiten cambiar la intensidad y el color de la luz o graduar la temperatura ambiente mediante el uso de termostatos para la calefacción, y así lograr un nivel de confort adecuado para cada lugar.
Para ello, es recomendable identificar y calificar las necesidades del usuario para planificar soluciones integradas que permitan programar respuestas tecnológicas que posibiliten ejercer un control efectivo del entorno.
La domótica es un conjunto de tecnologías que se utilizan para el control y la automatización inteligente de la vivienda. A través de paneles centralizados y sensores de diferente tipo, permite al usuario establecer las condiciones de cada ambiente, facilita el uso de los sistemas instalados y mejora las condiciones de habitabilidad. Entre otros beneficios, permite programar la temperatura de cada ambiente y la intensidad de las luces para diferentes momentos de día, e incluso encenderlas automáticamente cuando el usuario entra a una determinada habitación.
Al permitir que se mantengan apagados las instalaciones en los espacios que no están en uso, generan un importante ahorro energético y por consiguiente, permite menor gasto en concepto en los servicios de gas y electricidad. En tal sentido, como el panel de control ofrece al usuario un detalle completo de este consumo, se puede establecer un control más efectivo sobre el gasto mensual que insume.
El sistema domótico permite advertir al usuario en caso de situaciones de peligro, como una fuga de gas o agua, e incluso incorporar una alarma que notifica al teléfono móvil del propietario, señalando los lugares que fueron forzados y ver en tiempo real lo que está sucediendo en el edificio.
Recientemente, la firma holandesa UNStudio diseño una vivienda “inteligente” en Holanda septentrional, que mediante un sistema digital conecta todos los dispositivos de la casa. Inspirada en las “casas del futuro”, diseñadas por Alison y Peter Smithson para la exhibición Ideal Home Show en la década de 1950, y las Futuro Pod, diseñadas por el arquitecto finlandés Matti Suuronen en la década de 1960, el desarrollo de un diseño segmentado, con un diseño de planta en forma de flor, permite adaptar cada espacio a los diferentes aspectos de la vida familiar.
Ben van Berkel, socio fundador de UNStudio, señala que “Un desafío para el arquitecto en el diseño de la vivienda unifamiliar actual es una respuesta que refleje con precisión los grados de flexibilidad, sostenibilidad y automatización requeridos por los residentes, y la incorporación de estos en el concepto general del diseño”
La casa tiene dos niveles principales que están escalonados para crear un total de cuatro niveles diferentes en su interior, divididos en los cuatro lóbulos que definen la planta, alrededor de una escalera principal ubicada en el centro de la composición. El sistema de automatización de la casa controla la iluminación, el confort térmico e incluso algunos electrodomésticos; se puede operar a través de la pantalla táctil ubicada en la sala de estar o mediante un dispositivo digital de mano. También incorpora dispositivos adicionales que permiten establecer controles térmicos y lumínicos diferentes para cada habitación.
Además de la domótica, la “casa inteligente” incorpora materiales y las instalaciones necesarias para apuntar a un “edificio de energía neta cero”, sin resignar las necesidades que provienen de los estilos de vida contemporáneos.
Fotografías: Exteriores: © Fedde de Weert; Interiores: © Inga Powilleit
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